Médicos y cirujanos
Cirugía estética: la perfección de la normalidad
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1 año agoon
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RedazioneLa cirugía estética no es una búsqueda de la perfección, sino el redescubrimiento de la normalidad y la armonía de las formas.
Esta es la otra cara de la cirugía reconstructiva y estética, explicada con palabras sencillas pero eficaces por el Dr. Carlo Magliocca, en la entrevista que le hicieron los periodistas de Revée.
La intervención de reconstrucción mamaria representa la excelencia en el campo de la cirugía estética italiana. Uno de los profesionales de más renombre en este ámbito es sin duda el Dr. Magliocca, cirujano especialista en cirugía plástica reconstructiva y estética y presidente de Sociedad italiana de Cirugía plástica estética y reconstructiva (S.I.C.P.R.E.).
Cirugía estética reconstructiva: el cáncer de mama
Magliocca lleva ejerciendo de cirujano desde hace más de 40 años y en el hospital Fatebenefratelli de Roma forma parte del personal del equipo de profesionales que trata el cáncer de mama en la Unidad de Mama. «En la vida somos constantemente testigos del progreso; la cirugía estética también ha avanzado muchísimo —cuenta Magliocca—. Gracias a las mamografías y una mayor cultura de la prevención, las intervenciones quirúrgicas se han vuelto menos invasivas: las mastectomías totales son cada vez más raras y se vuelve a la normalidad más rápidamente.»
Los controles frecuentes, la creciente concienciación sobre el tema y la innovación continua son factores clave en las intervenciones contra el cáncer de mama. «El aspecto psicológico es el que más relevancia ha adquirido. Ya es normal la presencia de un psicólogo en las Unidades de Mama. El cáncer de mama afecta mucho a la mujer a nivel psicológico, y es un duro golpe para el órgano que simboliza su propia feminidad.»
De hecho, con motivo del Día Mundial contra la Violencia contra la Mujer, el Dr. Magliocca destacó otro aspecto de esta enfermedad: «Las parejas tiene un papel fundamental en la recuperación de la paciente. A menudo reaccionan con el silencio, a veces se van. En lugar de ser un apoyo, agravan la fragilidad del momento con una gravísima violencia psicológica.»
Cirugía estética y bienestar psicológico

La cirugía estética y reconstructiva no son operaciones quirúrgicas que se usan solo para el cáncer de mama: «A menudo son intervenciones para mejorar la forma del seno —continúa Magliocca—. Cuando una mujer nos pide que intervengamos en el cono mamario significa que no se ve cómo le gustaría y la conformación de su cuerpo le provoca inseguridad en sí misma.»
En ese caso, el cirujano, junto con la paciente, evalúa la técnica más adecuada: «Hay intervenciones de reconstrucción con el injerto del tejido adiposo de la paciente. Asimismo, está la llamada reconstrucción híbrida —donde se modela la prótesis se moldea con el tejido adiposo— o intervenciones donde solo se implanta una prótesis.»
La duración de un implante es de unos 10-15 años. Después de ese período, es necesaria una revisión del estado de la prótesis y es probable que haga falta otra intervención para reemplazarlo.
Postoperatorio: una cuestión de apoyo
Unos válidos aliados tras una intervención de reconstrucción mamaria son los dispositivos postoperatorios, como las prendas y los sujetadores de contención: «La intervención no termina con la operación quirúrgica, puesto que el postoperatorio es decisivo. El uso de sujetadores de sujeción y vendajes de contención sirve para mejorar, estabilizar y contener la prótesis para mantener el resultado a largo plazo. Los sujetadores de contención deben utilizarse durante un período de al menos tres meses para permitir la correcta integración del implante».
Entre los modelos recomendados, también están los productos de Revée: «Son maravillosos y brindan una excelente relación calidad-precio. De hecho, debo admitir que en comparación con otras marcas, aseguran un excelente resultado a precios inferiores».
Sin embargo, la cirugía estética reconstructiva no interesa solo a las mujeres: «Los hombres también tienen glándula mamaria y, aunque con un porcentaje menor, esta estructura en los varones con el paso de los años puede enfermar y causar cáncer de mama. Una enfermedad que puede afectarles también es la ginecomastia, es decir, la hipertrofia de la glándula mamaria masculina. Esta patología —sigue— se ha desarrollado sobre todo desde que los hombres empezaron a tomar hormonas para estimular su organismo».
No todas las intervenciones reciben el visto bueno del equipo médico
«Personalmente me opongo a implantar una prótesis mamaria en una menor, salvo que se trate de una malformación que le genera un malestar psíquico grave a la paciente —explica Magliocca—. La edad más idónea es a partir de los 20-25 años. Sin embargo, si se está planeando un embarazo, no recomendamos la intervención hasta después de amamantar. El embarazo puede afectar de alguna manera el resultado estético. Mi concepto de estética se basa en la elegancia, la naturalidad y la proporción —continúa el cirujano—. Siempre trato de evitar los excesos. Incluso en una mamoplastia de aumento, siempre se deben mantener las proporciones armoniosas del cuerpo».
Por lo tanto, se debería confiar en profesionales competentes: «Lamentablemente, a veces, muchos cirujanos generales también se improvisan cirujanos plásticos. Es necesario informarse sobre el cirujano que tendrá que operarnos antes de fiarse a la primera. El primer criterio que se debería considerar es comprobar que el cirujano tenga el título de especialista en cirugía plástica, regenerativa, reconstructiva y estética, por lo que habría que investigar su currículum y verificar si forma parte de organismos acreditados».
Sujetador: ¿sí o no?
Para concluir, ante esta pregunta Magliocca contesta: «Sujetador sí o sí. Incluso para las mujeres embarazadas, al menos hasta el tercer mes de gestación, recomiendo usar un sujetador de contención para contener al máximo la forma y el tamaño de la mama.» El Dr. Magliocca concluye: «Asimismo, siempre sugiero medias elásticas y prendas para liposucción, para limitar los efectos de la estasis venosa periférica en las extremidades inferiores.»