Asociaciones
Veronesi, el compromiso de la asociación contra el cáncer femenino
Published
1 mes agoon
By
Redazione«Después de haber tenido un tumor, las mujeres que han recibido quimioterapia y tratamientos hormonales ven el running como una especie de redención, una vuelta a la normalidad»
Paolo Veronesi, catedrático de cirugía de la Universidad de Milán y director del Programa de Senología y de la División de Senología Quirúrgica del Instituto Europeo de Oncología de Milán
Conocer los tipos de cáncer que existen es la primera línea de defensa contra esta enfermedad que todo lo consume, y por eso hay asociaciones, médicos y grupos que colaboran en la concienciación.La Fundación Umberto Veronesi es una de las asociaciones más activas en este campo, y organiza eventos como los Pink Ambassadors.
La Fundación está presidida por Paolo Veronesi, catedrático de cirugía de la Universidad de Milán y director del Programa de Senología y de la División de Senología Quirúrgica del Instituto Europeo de Oncología de Milán, profundo conocedor de los distintos tipos de cáncer y de los problemas que cada uno conlleva.
Los varios tipos de tumores femeninos
«Los cánceres femeninos suelen ser muy frecuentes», explica Paolo Veronesi. «En particular, el cáncer de mama, que en 2022 registró cincuenta y cinco mil setecientos nuevos casos a lo largo del año», continúa, afirmando, sin embargo, que Italia cuenta con una red capilar dispuesta a responder a todas las peticiones de ayuda de las pacientes. El cáncer de mama es, sin embargo, una enfermedad menos grave que en el pasado, gracias en parte a las nuevas tecnologías y prácticas pre y postoperatorias y a los nuevos métodos quirúrgicos. En todo el mundo, el 90% de las mujeres que padecen esta enfermedad consiguen recuperarse.

Pero hay otros cánceres típicamente femeninos que afectan a las mujeres de forma constante, como el de ovario. «Cada año se producen algo más de cinco mil nuevos casos, pero presenta problemas complejos de prevención, diagnóstico y gestión clínica. Es una enfermedad difícil de prevenir y a veces muy compleja de tratar, aunque también en este campo hay grandes innovaciones», afirma Veronesi.
También existen tumores de útero. Este órgano se divide en dos partes, el cuello y el cuerpo. Cada una de estas dos partes puede verse afectada por el cáncer. Hoy en día, el cáncer de cuello uterino es muy poco frecuente y podría erradicarse por completo, ya que está causado por un virus, el VPH, para el que existe una vacuna. En cambio, el cáncer del cuerpo uterino, más concretamente del endometrio, es más frecuente en mujeres menopáusicas o con sobrepeso, pero es relativamente fácil de curar con cirugía.
Romper un tabú con el deporte
«Los cánceres femeninos son un gran problema, en primer lugar para las mujeres, pero también para la sociedad, porque suelen ser muy frecuentes», explica Paolo Veronesi,haciendo hincapié en la carga social que supone cada cáncer. De hecho, además de ser devastador para el individuo, el cáncer es una carga también para los amigos y la familia. En el pasado, hablar de cáncer era a menudo un tabú que había que evitar. «No se podía escribir ‘cáncer’ en los periódicos, en las revistas. Los enfermos tendían a esconderse, a aislarse de la sociedad», dice el profesor, pero añade que «hoy la situación ha cambiado mucho, la gente habla de ello en las redes sociales. Muchas personas, incluso conocidas e importantes, cuentan su experiencia».
Este logro se ha conseguido gracias a la valentía de las personas con cáncer, así como a la amplia información facilitada por médicos y asociaciones. La Fundación Veronesi, concretamente, ha luchado por ello a través del proyecto Pink Ambassador, que comenzó en 2014. El objetivo es concienciar a las mujeres curadas de cáncer sobre la actividad física, al tiempo que se educa al resto de la población sobre los beneficios de deportes como el running o el remo. «Las pruebas científicas demuestran que la actividad física no solo reduce el riesgo de enfermar, sino que también disminuye la probabilidad de recaída y recurrencia de la enfermedad», afirma Veronesi.
El proyecto Pink Ambassador también se ha ampliado gracias a las mujeres que han participado en carreras de sensibilización, y ahora las «embajadoras» están presentes en más de veinte ciudades y cuentan con la colaboración de la Federación Italiana de Atletismo. «Además de correr por sí mismas, aportan naturalmente un mensaje de esperanza y recuperación, un mensaje positivo de recuperar la posesión de la propia vida no como antes, sino mejor que antes, porque son mujeres que quizá no hayan corrido nunca en su vida», continúa Veronesi.
Médicos, entrenadores y pacientes unidos en la prevención
En la lucha contra el cáncer son esenciales dos tipos de prevención: la primaria y la secundaria. La prevención primaria se centra en prevenir la enfermedad, con el objetivo de evitar comportamientos de riesgo que puedan aumentar la probabilidad de desarrollar un cáncer. «Hay factores de riesgo que podemos controlar, que son modificables digamos, que dependen por tanto de nuestros hábitos, de nuestro estilo de vida», dice Veronesi,precisando sin embargo que algunos factores de riesgo no pueden modificarse, como en el caso de la familiaridad o la edad avanzada.
La prevención secundaria consiste en un chequeo preventivo para actuar con rapidez antes de que el tumor tenga tiempo de volverse incontrolable. «En el caso del cáncer de mama, somos capaces de diagnosticar esta enfermedad en una fase muy precoz, cuando es muy pequeño y aún no está en fase invasiva, por lo que con la extirpación quirúrgica conseguimos una curación muy, muy cercana al 100%», explica el médico.
¿Cómo se puede hacer este tipo de prevención? Mediante el esfuerzo conjunto de médicos, asociaciones, entrenadores y pacientes. Por ejemplo, la Fundación Veronesi ha conseguido que los pacientes del proyecto Pink Ambassadors sean seguidos no sólo por entrenadores federales, sino también por médicos, nutricionistas y psicólogos. Este enfoque multidisciplinar se utiliza en equipos de médicos oncólogos y cirujanos especializados en la lucha contra el cáncer, como las Unidades de Mama. Las Unidades de Mama. «Sólo así tendremos las mejores posibilidades de recuperación» , concluye Veronesi.